Windows 10 no se ha muerto por estas razones

Pensábamos que íbamos a tener 10 para rato, pero Microsoft no tiene intenciones de alargar mucho más la vida de su clásico sistema operativo. Ya justo cuando se anunció su sucesor, Microsoft confirmó que Windows 11 solo iba a recibir actualizaciones hasta 2025. A partir de entonces, el sistema operativo iba a pasar a mejor vida, junto a XP y Windows 7, un sistema abandonado y sin soporte a no ser que mantuviera una cuota de mercado que no se lo permitiera. Por desgracia, este 2022 los usuarios han actualizado en masa, a pesar de los problemas y las críticas.

-Windows 10 ha perdido una importante cuota de mercado

Aunque aún es cierto que Windows 10 sigue siendo la versión más usada, sus días pueden estar más que contados. Y es que, si nos fijamos en el último análisis de StatCounter, podemos ver que, en el último año, a pesar de haber sido un mal año para Windows 11, el sistema ha pasado de tener un 81.44% de cuita de mercado a un 69.75, con una gráfica que cae en picado.

Windows 11, por el contrario, sigue creciendo de manera exponencial, pasando de una cuota casi nula a principios de año a más del 16%. Windows 7, por otro lado, se debate entre el 9 y el 10%, resistiéndose a morir, y los demás sistemas operativos están ya prácticamente extintos.

Pero no solo estas analíticas muestran lo inevitable, sino que, si nos fijamos en las encuestas de hardware y software de Steam, los datos son aún más preocupantes. A pesar de que Windows 11 está repleto de problemas y quejas por el mal funcionamiento de los juegos, y desaconsejado para cualquier jugador, como podemos ver, 11 no ha hecho más que ganar adeptos mes a mes, teniendo actualmente una cuota de un 28% del mercado total de Steam, dejando a 10 en tan solo un 65%, y bajando.

MacOS y Linux siguen siendo sistemas operativos irrelevantes en el gaming, con un 2.45% y un 1.44% respectivamente.

-¿Podría 2023 ser el fin de Windows 10?

Por mucho que nos duela admitirlo, no solo podría serlo, sino que lo va a ser. Todos los ordenadores nuevos vienen ya con el nuevo sistema operativo instalado de serie. Además, los usuarios cada vez van actualizando más, siempre que cumplan con los requisitos mínimos, de manera que cada vez habrá menos equipos con Windows 10 y más con 11. Además, el cercano fin de soporte, junto con el cada vez más nulo soporte que Microsoft va dando a su anterior sistema, harán que Windows 11 dispare el número de usuarios, y 10 caiga en picado.

No sería extraño ver cómo, a mediados de año, las gráficas de ambos sistemas se cruzan, y a finales de año Windows 11, junto con su actualización de 2023, superan al clásico Windows 10. Pero el tiempo lo dirá.