Lo último que sabemos de Microsoft respecto a estos errores que, hace dos semanas, la compañía confirmó graves problemas relacionados con el gaming, bloqueando la actualización a todos los usuarios que aún no hubieran actualizado y fueran potencialmente vulnerables a estos problemas. Ahora, parece que Microsoft los ha abordado, y la actualización está más o menos libre de los problemas de rendimiento al jugar, pero ¿qué más problemas nos podemos encontrar?
-Todos los problemas con Windows 11 22H2
Por supuesto, esta actualización no estaba libre de problemas de compatibilidad con drivers, concretamente con los controladores de las tarjetas gráficas NVIDIA, las cuales estaban dando un rendimiento muy inferior al estado. Junto a este problema, también apareció otro problema con la función de captura de XBOX Game Bar, que impedía a los usuarios grabar sus clips cuando iban a jugar.
Más allá de los problemas relacionados con el gaming, también se han encontrado problemas de todo tipo que han afectado al 100% de los usuarios que han instalado esta nueva versión. Algunos ejemplos de los problemas que nos hemos encontrado desde el lanzamiento de esta nueva versión del sistema operativo son:
- Problemas al copiar archivos muy grandes, que hacía que el proceso de copia durara eternamente.
- Problemas al imprimir, tanto de conexión con la impresora como con la propia cola de impresión.
- El inicio de sesión con Windows Hello no ha funcionado correctamente.
- La función Direct Access pierde conexión constantemente.
- Escritorio Remoto deja de funcionar de repente, bloqueando todas las conexiones.
Debido a todos estos problemas, Microsoft llevó a cabo dos oleadas para bloquear la actualización a los usuarios. Y, de las dos, finalmente una de ellas, la relacionada con los juegos, se ha liberado. Por tanto, si hasta ahora no te aparecía la nueva versión en el PC, puedes buscar en Windows Update de nuevo para ver si ya está listo tu ordenador. Aunque, personalmente, te recomendamos no hacerlo.
-¿Cómo evitarlos?
A nivel personal no he tenido ningún problema con la nueva versión de Windows 11, más allá de algún bloqueo esporádico que, seguramente, estuviera relacionado con el propio juego. Y eso que instalé la 22H2 Insider desde que llegó al canal Beta, soy gamer y poseedor de una NVIDIA RTX. Sin embargo, sí son muchos los usuarios que aseguran tener mucho menos rendimiento que antes de actualizar, además de bloqueos y otros problemas a parte.
La mejor forma de evitar estos problemas es, si ya tenemos instalada la 22H2 de Windows 11, asegurarnos de instalar todos los parches lanzados hasta la fecha (hasta los opcionales) desde Windows Update. Y también actualizar todos los drivers del PC.
Si aún no hemos instalado la 22H2, directamente es mejor no instalarla y esperar unos meses, al menos hasta entrado ya el año que viene, para instalar esta versión.