Ubuntu Pro llega oficialmente a WSL, Canonical redefine el papel de Linux empresarial dentro de Windows

Canonical ha dado un paso que puede cambiar por completo la relación entre Windows y Linux en entornos profesionales: la compañía anunció la disponibilidad de Ubuntu Pro para Windows Subsystem for Linux (WSL), una variante especialmente diseñada para llevar el mismo nivel de soporte, seguridad y mantenimiento de largo plazo presente en los despliegues nativos de Ubuntu hacia las máquinas que ejecutan Linux desde Windows 10 y Windows 11.

La propuesta sitúa a WSL en un terreno donde hasta ahora apenas había podido competir: el de los entornos regulados y corporativos, donde los ciclos de vida extensos, las auditorías de seguridad y el cumplimiento normativo son obligatorios.

-Una nueva capa de seguridad y mantenimiento para un Linux que vive dentro de Windows

Durante años, WSL ha sido una herramienta apreciada por desarrolladores, pero con limitaciones evidentes para empresas que requieren garantías de soporte profesional. Canonical intenta resolver este problema incorporando en WSL la misma promesa que define a Ubuntu Pro: hasta 15 años de soporte, parches continuos para vulnerabilidades, actualizaciones críticas y mantenimiento para un enorme catálogo de paquetes open source.

Esto significa que tecnologías centrales del ecosistema actual —como Python, Rust, Go, Docker o Node.js— quedan cubiertas dentro de un ciclo de estabilidad extendido, y no en manos de mantenimiento informal por parte de cada usuario. Canonical subraya que la intención es simple: convertir a WSL en una plataforma apta para organizaciones donde la auditoría de software es tan importante como la productividad.

-Un soporte profesional que transforma a WSL en una herramienta de trabajo certificable

Uno de los cambios más relevantes es la incorporación de soporte profesional para quienes utilicen WSL como entorno de desarrollo. A través del plan Ubuntu Pro + Support, los equipos técnicos tendrán acceso a asistencia por ticket o por vía telefónica, una prestación reservada tradicionalmente para despliegues locales o nativos en servidores.

Esto abre una puerta para empresas que buscan homogeneizar sus entornos de desarrollo sin obligar a sus empleados a abandonar Windows como sistema operativo principal.

-Landscape se suma al ecosistema: administración centralizada desde Windows

Canonical también integra, en fase beta, compatibilidad con Landscape, su plataforma de gestión masiva de sistemas. Esta función permite supervisar, desde un mismo panel, todas las instancias de Ubuntu Pro instaladas en los equipos Windows de una organización.

La administración incluye revisión de políticas de seguridad, cumplimiento normativo, configuración centralizada y monitorización de estado. Aunque aún se encuentra en desarrollo, su potencial es evidente: sistemas Windows y sus subsistemas Linux gestionados de manera unificada, algo que hace unos años habría parecido contradictorio.

-Un paquete MSIX con integración nativa en las herramientas de Microsoft

Ubuntu Pro para WSL se distribuye como un paquete MSIX desde la Microsoft Store, lo que es clave para la adopción empresarial. Gracias a ese formato, puede integrarse en herramientas como Intune, Group Policy o sistemas de despliegue interno, permitiendo instalarlo de forma masiva en cientos o miles de equipos sin fricción.

Para organizaciones que operan detrás de firewalls estrictos, Canonical habilita también la descarga de imágenes internas, de modo que cada departamento de IT puede controlar exactamente qué versión se distribuye y bajo qué condiciones.

-“La suscripción más completa para proteger software open source”, promete Canonical

En su ficha oficial dentro de la Microsoft Store, Ubuntu Pro para WSL destaca que su cobertura de seguridad abarca más de 23 000 paquetes adicionales presentes en los repositorios de Ubuntu. La compañía enfatiza que esta suscripción no reemplaza al soporte LTS tradicional, sino que se superpone para extender su ciclo de vida y blindar el software crítico empleado en entornos de producción.

En la práctica, esto significa que un desarrollador que utilice WSL para programar aplicaciones web —ya sea con WordPress, MySQL, Node.js o Docker— trabajará con un entorno endurecido, mantenido y revisado durante más de una década.

-Un modelo flexible: gratuito para usuarios individuales, profesional para empresas

Ubuntu Pro para WSL mantiene el mismo esquema de licencias del Ubuntu Pro convencional. Los usuarios particulares pueden activar una suscripción sin coste, con los límites ya conocidos del programa, mientras que las organizaciones pueden optar por planes de pago que incluyen el soporte avanzado y la capacidad de gestionar despliegues en gran escala. Canonical pone a disposición documentación técnica detallada, guías de despliegue y herramientas de migración destinadas a equipos que ya trabajan con WSL pero necesitan modernizar su infraestructura.

-Un paso decisivo en la convergencia entre Windows y Linux

Ubuntu Pro para WSL no es simplemente una extensión del soporte de Canonical: es el intento más sólido hasta ahora de convertir a WSL en un espacio viable para operaciones corporativas reales. La combinación de mantenimiento prolongado, integración con herramientas empresariales de Microsoft, soporte oficial y administración centralizada coloca a WSL en una nueva categoría. Ya no es únicamente una consola de Linux dentro de Windows, sino un subsistema capaz de cumplir estándares de seguridad y estabilidad comparables a los de un servidor Linux tradicional.

La iniciativa también plantea una lectura estratégica: la alianza entre Microsoft y Canonical sigue profundizándose, y ambas compañías parecen estar construyendo un modelo híbrido donde Windows se convierte en la “superficie” y Linux en la “infraestructura” de trabajo para buena parte del ecosistema de desarrollo moderno.