¡Ten mucho cuidado! Esta función de WhatsApp viene activada por defecto y deberías desactivarla ahora

La empresa responsable de WhatsApp es plenamente consciente de la relevancia que tiene su aplicación como herramienta de comunicación y del papel esencial que juegan la privacidad y la seguridad para los millones de usuarios que la utilizan a diario. Por ello, no solo incorpora nuevas funciones con frecuencia, sino que también busca reforzar la protección de los datos personales en la mayoría de los escenarios posibles.

No obstante, la aplicación llega al usuario con una configuración predeterminada que, si bien está pensada para facilitar la experiencia y evitar complicaciones técnicas, puede convertirse en un riesgo importante para la seguridad. WhatsApp intenta adaptarse a todo tipo de perfiles, incluidos aquellos que no poseen grandes conocimientos tecnológicos, y por esa razón ofrece un conjunto de ajustes iniciales pensados para la simplicidad. Sin embargo, esa comodidad puede abrir la puerta a amenazas que comprometen la fiabilidad de la plataforma y de los dispositivos en los que se utiliza.

-El riesgo de la descarga automática de archivos

Uno de los aspectos más sensibles dentro de la configuración predeterminada es la descarga automática de archivos multimedia. Aunque WhatsApp permite mucho más que simples chats de texto mensajes de voz, llamadas convencionales, videollamadas e intercambio de ficheros de diversa naturaleza, es precisamente en esta última función donde se encuentra un punto débil.

De forma predeterminada, la aplicación está configurada para descargar automáticamente cualquier archivo recibido, ya sea una imagen, un vídeo o un documento, sin que el usuario intervenga. Este mecanismo, aparentemente cómodo, supone un peligro significativo: si el dispositivo recibe un archivo malicioso, este puede instalarse o ejecutarse sin que la persona lo advierta, exponiendo así su información personal y sus datos almacenados.

-¿Cómo desactivar la función peligrosa?

Para reforzar la seguridad, resulta fundamental desactivar esta opción que viene habilitada por defecto. Los pasos son simples y cualquier usuario puede aplicarlos en pocos segundos:

  1. Abrir la aplicación oficial de WhatsApp de manera habitual.
  2. Pulsar sobre los tres puntos verticales situados en la esquina superior derecha de la pantalla principal para acceder a Ajustes.
  3. Una vez dentro, dirigirse al apartado Chats.
  4. Localizar y desactivar la opción Visibilidad de archivos multimedia.

Con esta acción, WhatsApp dejará de descargar automáticamente fotos, vídeos u otros archivos enviados a través de los diferentes chats, reduciendo de manera significativa la posibilidad de que malware o spyware ingresen al dispositivo sin consentimiento.

-Amenazas documentadas a través de archivos en WhatsApp

El riesgo no es hipotético: diferentes empresas de ciberseguridad han documentado amenazas que aprovechan la descarga automática de archivos en la aplicación. Algunos ejemplos relevantes son:

  • Troyanos bancarios como BRATA: identificados por Bitdefender, se distribuían en archivos que, tras ser descargados, podían robar credenciales financieras y comprometer cuentas bancarias.
  • Vulnerabilidades de ejecución de código: ESET reportó la vulnerabilidad CVE-2025-30401, que permitía a los atacantes enviar ejecutables maliciosos disfrazados de imágenes o documentos aparentemente inofensivos.
  • Spyware camuflado en archivos multimedia: en múltiples ocasiones se han detectado vídeos o GIF que, al abrirse, instalaban software espía en segundo plano, recopilando información sensible sin que el usuario lo notara.

-Una medida necesaria para proteger la privacidad

La seguridad en WhatsApp no depende únicamente de las medidas implementadas por la compañía, sino también de las decisiones que cada usuario adopte en la configuración de su cuenta. Desactivar la descarga automática de archivos no solo elimina una de las principales vías de entrada de malware en dispositivos móviles, sino que también garantiza un mayor control sobre lo que se almacena y abre en el teléfono. En un entorno digital donde las amenazas evolucionan constantemente, este ajuste se convierte en una medida esencial para mantener la privacidad y la integridad de nuestros datos.