¡Malas noticias! Microsoft retrasa la función de Windows 11 25H2 que llevabas años esperando

Microsoft ha comenzado a desplegar a nivel mundial la nueva versión de Windows 11 25H2, la actualización más esperada del año para su sistema operativo estrella. Como suele suceder en este tipo de lanzamientos, la distribución será progresiva: millones de ordenadores compatibles recibirán las mejoras de forma escalonada en las próximas semanas, garantizando que la experiencia sea lo más estable posible.

La compañía ya adelantó el listado de funciones incluidas en esta entrega, donde destacan la mayor integración de la inteligencia artificial a través de Copilot y la llegada, aunque con limitaciones de Recall, la herramienta capaz de registrar y recuperar actividades pasadas del usuario para facilitar búsquedas contextuales. Sin embargo, no todas las promesas se han materializado en esta primera oleada.

-Diferencias entre usuarios domésticos y empresariales

Uno de los puntos más llamativos de la actualización es la distinción que Microsoft hace entre equipos personales y corporativos. Mientras que en los ordenadores de uso individual Copilot y Recall comienzan a tener mayor protagonismo, en los entornos empresariales ciertas funciones aparecen deshabilitadas por defecto. La compañía justifica esta decisión en aras de la seguridad y la compatibilidad con infraestructuras críticas, donde una mala implementación podría ocasionar incidentes graves.

-La ausencia más notoria: Protección del Administrador

Pero la noticia que más revuelo ha generado no está relacionada con Copilot, sino con una función de seguridad que se esperaba desde hace meses y que, finalmente, no ha llegado en esta actualización: la llamada Protección del Administrador.

Esta característica, anunciada a mediados de 2025, tenía como objetivo blindar el acceso a privilegios administrativos. Su funcionamiento es sencillo en concepto, pero crucial en seguridad: antes de otorgar permisos elevados a un usuario, el sistema exigiría una verificación mediante Windows Hello, ya sea reconocimiento facial con la cámara, huella dactilar o PIN seguro. La idea era clara: impedir que cualquier proceso malicioso o intruso pudiera hacerse con el control total del sistema sin la confirmación biométrica del propietario.

-¿Por qué es tan importante esta función?

El mecanismo de la Protección del Administrador responde a un problema cada vez más frecuente en el panorama de la ciberseguridad: los ataques de escalada de privilegios. Esta técnica, utilizada por ciberdelincuentes, consiste en aprovechar vulnerabilidades para pasar de ser un usuario común a tener acceso completo como administrador.

Durante 2025, este tipo de ataques ha crecido de forma alarmante. Según datos del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), en agosto el 44% de las vulnerabilidades corregidas en sistemas Windows correspondían a este tipo de fallos. Casos como la crítica vulnerabilidad BadSuccessor demostraron lo fácil que puede ser para un atacante controlar un dispositivo sin necesidad de autenticación adicional.

De haberse implementado a tiempo, la Protección del Administrador habría supuesto un obstáculo adicional, interrumpiendo la cadena de ataque en su fase final. Expertos del Microsoft Security Response Center (MSRC) y de la firma Semperis calculan que este tipo de verificación podría reducir el éxito de las intrusiones en hasta un 68%, un porcentaje que podría cambiar el rumbo de muchos incidentes de seguridad.

-Microsoft retrasa su lanzamiento, pero promete su llegada

Aunque la ausencia de esta función genera cierta decepción, Microsoft ha dejado claro que la decisión responde a un motivo técnico: aún se están corrigiendo errores detectados en las pruebas previas. La empresa no ha especificado una fecha exacta de disponibilidad, pero sí confirmó que la Protección del Administrador aparecerá en futuras actualizaciones de Windows 11.

Este retraso, si bien frustrante para algunos, podría interpretarse como una medida responsable. En entornos empresariales, cualquier error en un mecanismo de seguridad tan sensible podría tener consecuencias devastadoras. Por ello, la prudencia de la compañía puede ser vista como un intento de asegurar que, cuando la función llegue, lo haga de forma robusta y confiable.

-Una apuesta por la seguridad en un escenario crítico

La llegada incompleta de las novedades de Windows 11 refleja el delicado equilibrio en el que se mueve Microsoft: por un lado, la presión por innovar con IA y nuevas funciones; por el otro, la obligación de garantizar que la seguridad no quede en segundo plano.

El despliegue de Copilot y Recall marca un hito en la evolución del sistema operativo, pero la ausencia de la Protección del Administrador recuerda que la ciberseguridad sigue siendo el mayor desafío para la compañía y para millones de usuarios que dependen a diario de sus dispositivos.

Mientras tanto, especialistas recomiendan mantenerse atentos a las actualizaciones, aplicar las medidas de seguridad ya disponibles en Windows 11 y, en entornos críticos, considerar mecanismos adicionales de protección hasta que la nueva función vea finalmente la luz.