El fin del Asistente de Google: Gemini está a un paso de reemplazarlo definitivamente y convertirse en la única IA de tu teléfono

Google está a punto de cerrar un capítulo fundamental de su historia en el ámbito de la inteligencia artificial. El Asistente de Google, una de las herramientas más emblemáticas de la compañía en la última década, tiene los días contados. Todo indica que su sustitución completa por Gemini, el asistente impulsado por IA generativa, está más cerca de concretarse de lo que muchos imaginaban.

Nuevas evidencias encontradas por el sitio especializado Android Authority revelan que el gigante de Mountain View se prepara para eliminar la última opción que aún permitía a los usuarios elegir entre el Asistente clásico y Gemini. Una vez que este cambio se haga efectivo, no habrá marcha atrás: Gemini será el único asistente virtual disponible en Android. Este paso no solo simboliza un relevo tecnológico, sino también una transformación profunda en la filosofía de interacción entre humanos y dispositivos móviles, con Gemini como el eje de un nuevo modelo basado en IA conversacional, comprensión contextual y generación de contenidos.

-El hallazgo técnico que confirma el cambio

El descubrimiento surge del análisis de los archivos APK más recientes de las aplicaciones Google y Gemini, donde Android Authority identificó fragmentos de código que anticipan la eliminación de los menús que actualmente permiten cambiar entre ambos asistentes. Hasta ahora, los usuarios podían acceder a esta configuración desde dos rutas distintas: a través de la app de Google, en Configuración > Asistente de Google > Asistentes digitales, o directamente desde la aplicación de Gemini, bajo una sección similar.

Sin embargo, en las próximas versiones, estas opciones desaparecerán completamente del sistema, forzando el uso de Gemini como la única interfaz de asistencia en Android. Aunque Google aún no ha comunicado una fecha oficial para este cambio, la eliminación de estos apartados dentro del código indica que la transición está en una fase avanzada de preparación.

-De Bard a Gemini: el nacimiento del nuevo cerebro de Google

La sustitución no es un movimiento improvisado. En realidad, forma parte de un proceso que Google inició a principios de 2024, cuando su chatbot experimental Bard fue rebautizado como Gemini, integrando progresivamente más capacidades de su ecosistema de IA. Desde entonces, Gemini ha evolucionado de ser un simple asistente conversacional a convertirse en el núcleo de la estrategia de inteligencia artificial de la compañía, integrándose en Android, Chrome, Workspace y los dispositivos Nest.

A diferencia del antiguo Asistente de Google, cuya lógica se basaba principalmente en comandos predefinidos y búsquedas contextuales, Gemini se apoya en modelos de lenguaje multimodales capaces de comprender texto, imágenes y voz de forma unificada. Esta diferencia técnica le permite no solo responder preguntas, sino también razonar, resumir, generar texto o interpretar contenido visual de manera similar a ChatGPT o Claude.

-Un relevo anunciado: el calendario hacia el apagón del Asistente

En marzo de 2025, Google confirmó oficialmente que el Asistente de Google dejaría de funcionar antes de finales de ese año. La compañía también informó que, tras esa fecha, el asistente no estaría disponible para descarga como aplicación independiente en la Play Store.

Esto significa que, en la práctica, cualquier usuario que actualice su dispositivo a una versión moderna de Android solo dispondrá de Gemini como asistente por defecto. Esta decisión responde a una tendencia más amplia dentro de la compañía: la consolidación de todos sus productos de IA bajo una única marca. El movimiento busca evitar la fragmentación entre servicios, unificar las experiencias de usuario y reforzar la identidad de Gemini como el cerebro central del ecosistema Google.

-Gemini toma el control del ecosistema Android

La integración de Gemini no se limita al móvil. Google ya está extendiendo sus capacidades a altavoces inteligentes, pantallas conectadas y dispositivos domésticos Nest, desplazando así al Asistente de Google de los entornos donde antes era dominante. De hecho, varias funciones clásicas del antiguo asistente, como el control del hogar inteligente, la redacción de mensajes por voz o la gestión de tareas, ya fueron migradas o reconstruidas bajo la nueva arquitectura de Gemini.

El cambio no está exento de controversia: algunos usuarios han señalado que, en su estado actual, Gemini no iguala aún la fluidez o compatibilidad del Asistente de Google en ciertas tareas cotidianas. Sin embargo, el enfoque de la empresa parece claro: priorizar el potencial de una inteligencia generativa capaz de evolucionar, aprender del contexto y anticiparse a las necesidades del usuario, incluso a costa de sacrificar temporalmente algunas funciones tradicionales.

-El impacto del cambio: una nueva era de asistentes inteligentes

El reemplazo del Asistente por Gemini marca un punto de inflexión en la evolución de Android. Durante años, el Asistente de Google fue una de las herramientas más consistentes del ecosistema, combinando comandos por voz, integración con aplicaciones y respuestas rápidas. Pero su arquitectura, diseñada en una era anterior a la IA generativa, alcanzó su límite. Gemini, en cambio, representa la siguiente fase: un asistente capaz de mantener conversaciones complejas, comprender matices del lenguaje y generar contenido personalizado.

Esto lo coloca no solo como un sustituto, sino como una nueva categoría de asistente digital, que combina las funciones clásicas de búsqueda con capacidades de análisis, escritura y razonamiento autónomo. El cambio también revela cómo Google planea enfrentar la competencia en el terreno de la inteligencia artificial, especialmente frente a ChatGPT de OpenAI, Copilot de Microsoft y Claude de Anthropic. Gemini no solo aspira a competir, sino a ser el punto de unión entre todos los servicios de Google, desde Gmail hasta Maps, potenciando cada uno con IA contextual.

-Una transición inevitable, pero no exenta de nostalgia

Para muchos usuarios, el Asistente de Google ha sido una presencia constante: el encargado de leer mensajes, reproducir música, o activar luces con un simple comando de voz. Su desaparición simboliza el fin de una era tecnológica que marcó los primeros años de los asistentes digitales.

Sin embargo, la dirección que ha tomado Google deja poco espacio para la duda. El futuro de la compañía se articula alrededor de la inteligencia artificial generativa, y Gemini es la pieza que une todas las partes de ese ecosistema. La coexistencia de ambos asistentes fue una etapa de transición; su reemplazo total, un paso lógico hacia la consolidación de un modelo más ambicioso.

Lo que comenzó como un simple experimento de voz en 2016 ahora culmina en una plataforma capaz de razonar, aprender y crear. Gemini no es solo el heredero del Asistente de Google: es el intento de la compañía por reinventar la interacción entre humanos y máquinas. Y aunque su llegada definitiva implique despedirse de una herramienta familiar, también abre la puerta a una experiencia más profunda, natural y personalizada.

El Asistente de Google se retira, pero su legado permanecerá en el ADN de Gemini. El futuro de Android, y quizás del propio ecosistema Google, ya no depende de comandos predefinidos, sino de la capacidad de una inteligencia artificial que entiende, responde y evoluciona con nosotros.